NO TODOS LOS DE APARIENCIA FEA SON MALOS
Un héroe feo pero noble
Sinopsis
Y el hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y se
levantarán los
hijos contra los padres y los matarán. (Mc.13,12)
DREY GONZALEZ Fue en sus tiempos juveniles un joven emprendedor, trabajador
y con una honestidad a toda prueba. Como era hijo de padres humildes, hacedores
de la tierra, no pudo concluir su objetivo principal, su tan ansiada meta,
obtener un título universitario.
Como su perspectiva era irrisoria y lejana, Drey González al morir sus padres de ancianos, se adentró en los caminos agrícolas
y se convirtió en un fuerte productor del agro. Su ansiedad de marchar al lado
bueno de la vida lo indujeron a ahorrar en entidades bancarias en manera agradable
y constante, esto lo permitió lograr en un curso de 15 largos años, establecer una de
las empresas agro industriales más poderosas de la metrópoli urbana. Contrajo
nupcias por suerte con una hermosa y buena mujer, dulce y amable, sin embargo, algo cambiaría su vida sarcásticamente y para siempre.
En el camino se cruzó con políticos inescrupulosos, además con la envidia de
sus allegados, familiares y amigos y más que todo, la maldad de sus hijos que
se volvieron en su contra.
Sus hijos que eran doce, entre ellos dos hembras malvadas, cuales en mayoría,
menos uno, se levantaron contra su padre, aunándose a esta cruenta batalla imperdonable,
grupos y amigos de un círculo vicioso que se formaron con una componenda intensa y peligrosa con los
hijos de Drey. Este círculo de crápula
usurera y avarienta terminaron por
despojar a Drey González de sus pertenencia y ahorros.
Pasaron los años y siendo un
viejo incapacitado, vagaba por las
calles buscando quien lo ayudara a rescatar por lo menos un mendrugo de su
fortuna, con la finalidad de terminar sus días en un lugar cálido y acogedor,
pero sus hijos y grupos poderosos que se habían juntado en su contra, le impedían
el paso tan anhelado y le cerraban todas las puertas, el que se osaba ayudarlo
era vilmente asesinado. Mientras tanto en su peregrinar sin hogar, Drey tenía
inevitablemente que dormir en cualquier rincón, pasando frío y hambre, alimentándose
a veces de lo que inevitable conseguía en la basura.
Su esposa había muerto de sufrimiento y de nostalgia por él, la resignación
de no poder hacer absolutamente nada por ayudarle, impidiéndoselo en gran
manera sus hijos y allegados, esta
manera de vivir bajo un tormento inadecuado y constante hizo que Keyra perdiera
fuerzas, se volviera inestable de salud y falleciera.
Cuando se realizó el acto fúnebre ni siquiera lo dejaron acercarse
para despedirse de lo que más amaba en el mundo.
A Keyra, su amada que había fallecido por el dolor, la colocaron en un mausoleo bien acordonado con rejas metálicas y de alta seguridad para evitar que entrara al último aposento de su esposa, su dulce e inolvidable amor. Durante meses lloró postrado y en muchas noches solitarias a su mujer extinta frente de aquel cementerio, al cual el sereno le impedían entrar por temor a la represalia de sus hijos, familiares y políticos poderosos, los cuales inmerecidos disfrutaban de su cuantiosa fortuna.
Durante dos años estuvo durmiendo a las puertas del camposanto, hasta que sus hijos furiosos por la férrea persistencia lo mandaron a desalojar del la zona con desalmados y como diera lugar. Sin compasión alguna, a fuerza de estrujones y golpes le partieron algunos huesos y le hicieron brotar la sangre como arroyos turbulentos, incluso, le propinaron heridas punzo penetrantes que lo dejaron al borde de la muerte.
A Keyra, su amada que había fallecido por el dolor, la colocaron en un mausoleo bien acordonado con rejas metálicas y de alta seguridad para evitar que entrara al último aposento de su esposa, su dulce e inolvidable amor. Durante meses lloró postrado y en muchas noches solitarias a su mujer extinta frente de aquel cementerio, al cual el sereno le impedían entrar por temor a la represalia de sus hijos, familiares y políticos poderosos, los cuales inmerecidos disfrutaban de su cuantiosa fortuna.
Durante dos años estuvo durmiendo a las puertas del camposanto, hasta que sus hijos furiosos por la férrea persistencia lo mandaron a desalojar del la zona con desalmados y como diera lugar. Sin compasión alguna, a fuerza de estrujones y golpes le partieron algunos huesos y le hicieron brotar la sangre como arroyos turbulentos, incluso, le propinaron heridas punzo penetrantes que lo dejaron al borde de la muerte.
Un día de mal agüero, sus hijos hastiados de la insistencia de su padre, se cansaron de aquella búsqueda interminable de Drey por lograr una migaja de su fortuna y en ese día de oscura tormenta eléctrica lo secuestraron,
le arremetieron una paliza agobiante, inhumana, le dieron de comer vidrio molido, luego a beber vinagre y de una orina que habían recogido de todos, incluso de sus dos hijas.
Luego de este castigo sin piedad, le propinaron con saña inaudita un
arrastrado infernal, lo sujetaron a una Turbo moto y lo arrastraron sin misericordia por el duro suelo pedregoso del valle de la muerte, después que quedó yacente como un cadáver, como un sanguinolenta masa de huesos, carne molida y sangre, aún agonizando y respirando entrecortadamente y como aferrándose a la vida, movía un poco los labios pidiendo clemencia y un poco de amor a sus hijos queridos, sin embargo, con crueles intensa, lo envolvieron en sacos de pita, lo amarraron
con hilos de materia orgánica, terminándole rociando con pesticidas y cayéndole a patadas violentas lo arrojaron al drenaje de una cloaca que daba con salidas al océano.
Continuará.
Porqué desde
ahora en adelante, cinco en casa estarán una divididos, tres contra tres dos y
dos contras. lucas 12:52
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